En conmemoración del Día Nacional del Teatro y
coincidiendo con el Día de la Defensa de la Universidad Estatal, la Universidad
de Valparaíso distinguió al dramaturgo nacional Juan Radrigán, tras haber
obtenido el Premio Nacional de Artes de la Representación y Audiovisuales 2011.
En una ceremonia realizada en la sede de la carrera
de Actuación Teatral, la institución otorgó al dramaturgo la Medalla
Universidad de Valparaíso. El acto fue encabezado por el rector de la casa de
estudios, Aldo Valle; el decano de Arquitectura, Juan Luis Moraga; el
secretario general, Osvaldo Corrales, y el director de la carrera, Cristian
Figueroa.
En la ocasión, el rector Valle agradeció al
dramaturgo su trabajo en la UV, como académico de la carrera de Actuación
Teatral, así como el hecho de “haber escogido este oficio maravilloso que ha
ejercido y desplegado con tanto talento. El país, y una universidad como la nuestra,
debemos agradecer su sensibilidad”.
Por su parte, Juan Radrigán señaló que “yo no hago
discursos: yo escribo teatro”, añadiendo que le producía extrañeza que le
dieran premios, “si yo estoy tan tranquilo en mi pieza escribiendo”. Consultado
sobre el significado que da a las distinciones, dijo: “No lo sé, no tengo idea,
porque yo hago lo que me gusta, donde me siento cómodo; entonces que me den
premios por eso es insólito para mí, es como extraño. Pero no deja de agradarme
sí, ¿no ve que tenemos ego?”.
Respecto de la situación del teatro chileno actual,
el dramaturgo indicó: “Siempre le ha ido mal, por la falta de espacio y de
recursos. Cada vez se nota más. …Es que como yo hago clases en varios lugares,
veo que no tienen muchas posibilidades de mostrar. Hay gente muy buena, que
escribe, que actúa, pero que no tiene ninguna posibilidad de mostrar su
producto. Eso es lo que hay que tratar de corregir. No sé cuántos años llevamos
tratando de corregir eso”.
Radrigán se refirió también a la situación de la
educación en Chile: “Está bien complicada. Lo que a mí me consta, por lo que a
mí me toca, yo veo los desniveles en la educación, cómo están de preparados en
un lugar y cómo están, tan deficientes, en otros. Eso me toca verlo, y creo que
tiene que ver con las posibilidades económicas, y eso es muy patente, es una
grieta que existe, grande. Uno haciendo esto se da cuenta perfectamente”.
Finalmente, respecto de si el teatro puede ayudar a
que el país mejore, dijo: “Tiene la vocación de andar tratando de ayudar. Que
lo logre es otra cosa. Pero se hacen cosas, se está presente, y eso debe ser
válido”.
Por su parte, Cristian Figueroa destacó la fecha
escogida para distinguir a Juan Radrigán. “Para nosotros es importante porque
congenia el Día Nacional del Teatro con el Día de la Defensa de la Universidad
Pública, y están tan vinculadas ambas causas, en términos de revelar una
realidad de un país que lucha por mejores condiciones de vida”.
En este sentido, añadió que “Juan Radrigán es parte
representativa de una cultura que surge en la época de la dictadura, en que sin
panfletarismo, sin politiquería, se mueve con conciencia en la dignidad del ser
humano, se levanta. Para nosotros hablar de Juan Radrigán es hablar del teatro
chileno en los últimos treinta años, y esperamos que por muchos años más”.
Destacó el director de la carrera de Actuación
Teatral que “nos hemos vinculado, en forma muy personal, en una relación de con
él, trabajando de a poco con nosotros, en talleres, en cursos. Él quiere venir
acá, trabajar con nosotros, eso lo pone muy contento y lo pasa bien. Esto es un
gesto importante de la Universidad para un hombre que significa mucho para el
teatro chileno y también para nuestra carrera”.
Juan Radrigán tiene 75 años. A los doce comenzó a
escribir poesía y cuento, y a los 42 escribió su primera obra teatral. Sus
obras han contado con grandes directores y grandes actores, y su variado
registro creativo le ha dado prestigio nacional e internacional. Luchador
social, sus creaciones se relacionan con la marginalidad. Su trabajo más
reciente es la exitosa puesta en escena “Amores de cantina”.