La mañana del martes 23 de agosto fue despedido en París el cineasta nacional Raúl Ruiz, en una ceremonia que se llevó a cabo en la iglesia de Saint Paul, con la presencia de cerca de 300 personas, entre las que se encontraban las actrices Chiara Mastroiani y Catherine Deneuve, el productor Paolo Branco, y varias estrellas del cine europeo, también el embajador chileno en Francia, Jorge Edwards y varios amigos, acompañaron a su esposa Valeria Sarmiento y a los familiares del cineasta residente en París.
Los restos de Ruiz llegarán a Chile el jueves 25 de agosto, alrededor de las 8.30 horas, a través de un vuelo de la línea Air France. Esa misma tarde, el director de "Palomita Blanca" y "Misterios de Lisboa" será trasladado a la Iglesia de la Divina Providencia, ubicada en Providencia 1619, donde se velarán sus restos hasta el viernes 26 de agosto, día en que se llevará a cabo una ceremonia religiosa al mediodía, a cargo del sacerdote Enrique Moreno.
Una vez terminada la misa, pasará por la Pérgola de las Flores, para finalmente, ser sepultado en el Cementerio Parque del Recuerdo, en un espacio al lado de su madre.
Raúl Ruiz Pino nació en Puerto Montt, el 25 de julio de 1941, fue un cineasta comprometido con el proceso socialista chileno, truncado con el golpe militar, por lo que emigró obligatoriamente a Francia, donde fue acogido en su exilio y donde desarrolló su carrera cinematográfica, al igual que su esposa Valeria Sarmiento, también cineasta; gradualmente se le catalogó como un autor distinto, que realizaba películas cada vez más creativas, surrealistas y experimentales, reconocido entre sus pares, por su particular impronta plasmada en más de un centenar de películas.
Raúl Ruiz hizo 113 películas en 48 años, la penúltima, gravemente enfermo, y la última, aprovechando una mejoría leve antes de empeorar fatalmente, estaba afectado por un cáncer de hígado desde el año 2009 y falleció el pasado viernes 19 de agosto, tras pasar varios meses con un estado de salud debilitado tras someterse a un trasplante de hígado.
Según relatan sus amigos era un adicto al trabajo, que se inspiraba cada día y que no descansaba entre rodaje y rodaje. Cineasta de gustos omnívoros, Raúl Ruiz consumía todo tipo de libros, desde la psicología hasta las matemáticas. Justamente, su último filme fue “La noche de enfrente”, un trabajo que lo devolvió a Chile, cerrando con geométrica claridad su carrera, como un círculo perfecto. La cinta está aún por estrenarse, y poco antes de internarse en un centro hospitalario parisino, Raúl Ruiz le dio la puntada final en la sala de montaje. Una semana y media después, murió en el Hospital Saint Antoine de París.
El Consejo Nacional de la Cultura coordinó, junto a la Cineteca Nacional, el ciclo gratuito "Homenaje a Raúl Ruiz", que contempla la exhibición de 10 películas en su honor.
Según relatan sus amigos era un adicto al trabajo, que se inspiraba cada día y que no descansaba entre rodaje y rodaje. Cineasta de gustos omnívoros, Raúl Ruiz consumía todo tipo de libros, desde la psicología hasta las matemáticas. Justamente, su último filme fue “La noche de enfrente”, un trabajo que lo devolvió a Chile, cerrando con geométrica claridad su carrera, como un círculo perfecto. La cinta está aún por estrenarse, y poco antes de internarse en un centro hospitalario parisino, Raúl Ruiz le dio la puntada final en la sala de montaje. Una semana y media después, murió en el Hospital Saint Antoine de París.
El Consejo Nacional de la Cultura coordinó, junto a la Cineteca Nacional, el ciclo gratuito "Homenaje a Raúl Ruiz", que contempla la exhibición de 10 películas en su honor.